jueves, 4 de septiembre de 2008

CALASPARRA - XIX FERIA TAURINA DEL ARROZ. 1ª Novillada de Feria

Crónica: P. Bermejo. Reportaje Gráfico: Laforet.

LOS CEBAÍTAS SUPERARON A LOS NOVILLEROS.
Entrada: Dos tercios
Tiempo: Caluroso y sin viento.
Duración: Casi dos horas y media
Cuadrillas: En general mal durante toda la tarde, excepto el buen puyazo de Anderson Murillo al cuarto, un par de banderillas de Juan Soriano al primero y la brega del quinto de la tarde.
Ganadería: Cinco novillos de Hrdos de Cebada Gago y uno de Salvador García Cebada (mismo encaste). Justos de presentación y kilos, limpios de pitones y de buen juego. Todos pelearon en varas y no hicieron ni una cosa fea, ni tan siquiera un derrote. Bravos, encastados y con movilidad.

Juan Belda: Saludos y saludos desde el tercio.
Abel Valls: Ovación y silencio.
Román Pérez: Oreja y oreja.

Juan Belda: Su primero fue un novillo con calidad y mucha clase, el bravo torero murciano le plantó cara en la zona de chiqueros, ya que tenía la querencia del encierro, no pudiendo robarle más que muletazos sueltos y una tanda por el pitón izquierdo. Le mató de pinchazo y entera caída.
En su segundo tampoco se pudo lucir, empezando por el exceso de capotazos de la cuadrilla y una lesión en la mano derecha del novillo. Aún así le robó varias tandas a un novillo que quería coger la muleta, la espada le jugó una mala pasada. Le mató de tres pinchazos y estocada casi entera. El novillo fue aplaudido en el arrastre.

Abel Valls: No tuvo su tarde. En su primero estuvo desdibujado, toreando en la distancia sin confiarse, a pesar de que el cebada no le planteó grandes problemas. Eso sí, le pidió una distancia que Abel no le supo dar, inició la faena en el centro del ruedo, no llegando al respetable, le mató de pinchazo y entera caída.
Igual que en su primero, a este tampoco le encontró la distancia, le dio varias tandas pero sin eco en el público. Le mató de cuatro pinchazos y estocada caída.

Román Pérez: Le tocó el mejor lote, tanto que se vió en algunos momentos desbordado por la bravura de “Caliche”, que así se llamaba el primero de su lote. Recibió un extraordinario puyazo y llegó a la muleta con movilidad y transmisión. Román le dio varias tandas por ambos pitones francamente buenas, aunque un tanto acelerado. Le mató de un pinchazo y estocada entera. Se le concedió una oreja. Este novillo mereció la vuelta al ruedo por su comportamiento.
En su segundo resaltar tres verónicas de salida. Este novillo recibió dos puyazos: uno en toriles y otro en su sitio, tapándole la salida, el inicio muleteril fue por bajo, ganando terreno, le dio varias tandas por ambos pitones que llegaron al público. Finalizó con unos alardes taurinos. Le mató de estocada entera. Le valió una oreja.

















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